Ayer retome tus versos, naufrague en cada palabra que deslizaba mi mirada y una lágrima se asomo fugaz por mi rostro. ¡Con que sensibilidad lograste atrapar mi emoción!, y por un instante me supe tuya, sin mas deseo que de observarte detalladamente, ¡sé! podría mirarte interminables noches, ¡sé! que con mis ojos te besaría, y te haría el amor hasta saciarme, pero nunca mis manos tocarían tu rostro, si lo hago corro el riesgo de que se marchite tu piel.
viernes, 18 de enero de 2008
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3 comentarios:
Al menos las imagenes y recuerdos se guardan para no correr ese riesgo de marchitar su piel...
Me gsuta!
Es hermoso!
Sule suceder, de que todo lo que todo se marchita
La magia es mas tangible en la distancia.. suele suceder-me
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