Me gusta la humanidad sobre mi hombro
Esa mujer simple que a veces se equivoca
Me gusta la humanidad de un secreto a voces
La mirada que no sabe decir porque ya lo ha dicho todo.
Me gusta la sencillez de mis instantes callados
Cuando sin querer miro el vacio buscando cualquier razón.
Me gustan las calles pobladas de pasos perdidos.
Las huellas abandonadas por cualquier transeúnte irresponsable.
Los recuerdos dejados en cada esquina
Las manos que jamás se encuentran.
Amo mi humanidad incomprensible
la terquedad solitaria que me busca.
Una amante que me espera en algún lugar lejano
Poblada de pasados y dispuesta a esperar.
Amo la humanidad que dejara mi cuerpo en una ciudad perdida.
Sin ser donde me esperen.
Amaré la equivocación de mi llegada,
la ciudad fantasmal que me acoja
y la mujer que me reciba sin esperar.
Me gusta la lluvia porque un día de noviembre
Nací Lloviendo
Me gusta verlo todo
Por eso no tengo ojos
Me gusta saberme esperada
Aunque nadie me este esperando.
También Buscar
a nadie, solo buscar.
A veces pienso
Este mundo esta loco.
Tangos miedos encontrados que se dan amor
Y los silencios que se dan las manos.
Tantas palabras insuficientes para las necesidades del espíritu.
Amo el lenguaje que como velo,
Nos hace creer cercanos
Siendo en realidad el muro que nos separa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario