
Búscame detrás de los árboles sumidos en la noche
más allá de las últimas casas de los barrios pobres
entre las callejuelas desamparadas y en los hoteluchos
en los cementerios que sueñan con el coro infinito de los grillos
en los parques ungidos por el crimen y la pasión
en los palacios ruinosos que el crepúsculo agiganta.
Soy el pasajero de los trenes de medianoche
el viajero de barcos navegando entre nieblas
o bajo cielos negros para una luna en agonía
el viudo de bodas imposibles
el nostálgico de la Edad de los Dioses
el soñador de imperios abolidos y leyendas siniestras
el narrador de historias de enanos crueles y dulces bueyes degollados
el amigo fúnebre y el amante encadenado
el trovador de castillos-en-el-aire y desiertos ardientes
el pescador de almas condenadas
el que tiembla en la zarza ardiente de la melancolía
y el que gime en una obscena agonía.
Allí donde los lirios cortados destilan sangre y llanto emponzoñado
allí donde respira detrás de cada flor nocturna
un hada del Paraíso Perdido
allí donde solloza un niño en el limbo de los que no nacieron
en esas estancias penumbrosas donde vibran canciones de ahorcados
allí estaré infatigable esperándote.
Allí donde Mefistófeles rasurado y cortés
escucha las cantatas de Bach y los gozos seráficos de Händel
allí donde Bolívar destroza con su espada los altares patrióticos
allí donde Goethe medita ante la tempestad del Gran Océano
donde Beethoven suda sangre en los huertos silenciosos
donde Baudelaire conversa con los vampiros y los brujos
en laberintos donde la luna sueña sombras azules
y Proust se asfixia de amor en estancias de fieltro
allí donde Shakespeare vuela por cielos desmesurados
en los cárdenos horizontes de erizados Himalayas
allí estaré, infatigable, esperándote.
1 comentario:
lindo...
poco se puede decir de semejante hermosura...
hermoso blog...
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