miércoles, 29 de septiembre de 2010
sábado, 25 de septiembre de 2010
El olvido no había llegado aún, ella sabía como pocas, que el recuerdo era una compañía constante, la mujer despojada de experiencias acude siempre a la memoria. El olvido era lejano, ínsipido, una palabra, tal vez, que ella poco conocía. Pocas veces había olvidado, vivia de los instantes pasados, como de sueños recién vividos. Tenía miedo de despojarse de los recuerdos, tenía miedo de dejar ir. Pero tuvo que aprenderlo. A fuerza de tener paciencia, a fuerza de dejar ser todo. Ella no quería recordar mas, quería vivir.
domingo, 5 de septiembre de 2010
Suscribirse a:
Entradas (Atom)